Monday, August 23, 2010

DAÑO A LA SOCIEDAD

Hay dos cosas que están haciendo daño, mucho daño. Por un lado, el “bicing” y, por otro, la fotografía.
El “bicing” es como se conoce en Barcelona el servicio municipal de alquiler de bicicletas. Básicamente, consiste en pagar una cuota anual que te permite hacer trayectos en bicicletas que se pueden encontrar en estaciones que el ayuntamiento ha repartido por toda la ciudad. Como se puede ver, la idea es buena; a pesar de no ser socio, en cuanto supe que lo iban a hacer, me pareció algo muy bueno, además, se juntaban dos cosas en una, el deporte y el “moderneo” típico de esta ciudad. Respecto al deporte, qué decir que no se sepa. Pues eso, que es bueno para la salud y bla bla bla. Además, nos ahorramos un poco de CO2, que tampoco está mal, ¿no? Lo otro, lo del “moderneo”… Bueno, estamos ya acostumbrados y tampoco nos afecta tanto (al menos en mi caso) como el auténtico motivo por el cual se deberían quemar todas las estaciones de bicicletas con todas ellas dentro, claro. El auténtico motivo es que son una molestia para los que van en coche y para los que van andando. Evidentemente, hay excepciones, pero por lo general (si no se generaliza, nunca puede haber debate…), me parecen un estorbo porque no saben llevarlas. El problema es que muchos usuarios del “bicing” son individuos que aprendieron a montar en bicicleta con 8 ó 9 años y a los 14 la abandonaron porque ya eran grandes (fumaban…) y las bicicletas, ya se sabe, son para niños (ah, y pobres). Ahora, que son adultos y es guay pasearse por la ciudad en bicicleta (uno es más europeo y todos sabemos que Barcelona es Europa, no España), hay que montar en bicicleta (y molestar). Me pone de los nervios ir en coche y tener delante a uno de estos ciclistas (sic) que parece que se vaya a caer. Equilibrio, chaval/-a, equilibrio, porque, encima, te caerás, te pasaré por encima y dirás que te he tirado.
Respecto a la fotografía… ¿Por qué, de repente, a todo el mundo le gusta la fotografía? Bueno, debería fotografía digital. Y subrayo lo de digital. Antes, cuando la fotografía no era digital, cuando iba con carretes, no veía a nadie diciendo “siempre me ha gustado la fotografía”. Ahora, sí, ahora todos son expertos. ¡Pero, si no habías pillado una cámara en tu vida, no sabías lo que era un contrapicado! Recuerdo que cuando era pequeño, cada septiembre, mis hermanos y yo siempre nos quejábamos a mi padre por el mismo motivo: todas las fotos eran de paisajes… Ahora, el que no hace veinte fotos al mismo paisaje de veinte maneras diferentes no es nadie. Ah, que son artistas. Es verdad.
Pues lo dicho. Daño, mucho daño.

Wednesday, August 18, 2010

INGENIO Y TECNOLOGÍA

Hay cosas que de tanto repetirlas se toman como ciertas. Una es que Japón y China sólo saben copiar. En el caso de Japón, no sé si es cierto o no. Si no me equivoco, gran parte de su cultura la cogieron de China, pero no es el caso que me interesa ahora mismo. El que me interesa es China. Dicen que es una cultura milenaria y como tal, no me imagino que haya aguantado tanto tiempo a base de copiar y copiar. Haciendo una pequeña búsqueda en internet, veo que inventaron el papel, la imprenta, la brújula, la pólvora, el ábaco...
El caso es que hace unas semanas vi algo que me dejó alucinado. Debido a que hay ciudades chinas que tienen mucho tráfico se han inventado un autobús al que, según una web, llaman "autobús a horcajadas". ¿Y en qué consiste? Pues, copiando de esa misma página web, se trata de una mezcla entre tren y autobús que correrá por rieles a los lados de las calles, y que llevará a sus pasajeros elevados sobre el tráfico. Y como una imagen vale más que mil palabras, adjunto un dibujo de cómo podría ser el invento.
¿Alguien sigue pensando que sólo saben copiar? Pues nada, que copien mientras aquí nos dedicamos a hacer tranvías... otra vez.

Thursday, August 05, 2010

AL FINAL, TODO SE SABE

Acabo de terminar de leer "Se sabrà tot", de Xavier Bosch. No suelo leer novelas, pero esta vez, sí he leído una. Entre que es un periodista que me gusta y que en Sant Jordi hicieron bastante publicidad de su libro, pues al final, piqué y lo compré.
Durante un par de años estuve escuchando cada mañana el programa de radio que hacía en RAC1 hasta que se fue a dirigir el diario Avui. Durante un año no supe nada de él hasta que, de repente, me entero de que había dejado su puesto de director del periódico y va a publicar un libro. Libro en el que el protagonista es también el director de un periódico que dura en el cargo también un año. Pensé que sería autobiográfico, pero no. O eso dice.
Me imagino que lo único que tiene de autobiográfico es la presión del grupo editor del diario sobre el director y la influencia que intentan ejercer los partidos políticos en su beneficio. A parte de eso, por nuestro bien, espero que el resto sea fruto de su imaginación. El caso es que ha ganado el premio Sant Jordi 2009 con esta novela y, vaya, no sé si es buena y pasará a la historia (que lo dudo), pero es entretenida. Uno ya sabe que los periódicos tienen muchos intereses, pero yo he alucinado con todo lo que se cuece en una redacción y todo lo que intentan hacer para vender más ejemplares. Y qué decir de los políticos, que no tienen escrúpulos a la hora de acabar con la carrera de compañeros de partido. Todo (o casi todo) vale. Encima, con un lenguaje simple sin llegar a ser vulgar y una ironía del narrador que me hace esbozar una sonrisilla. De hecho, si fuese director de cine, ya sé cómo la pasaría al séptimo arte, pero como no lo soy, sólo espero que alguien lo haga lo antes posible.