Monday, December 29, 2008

CADENA DE FAVORES

Realmente es de regalos, pero bueno. El caso es que el otro día hice eso del amigo invisible y quién me iba a decir a mí que mi regalo iría a parar a manos de Amparó Moreno. Sí, sí, Amparo Moreno, la actriz. A mí me tocó una ruleta de chupitos que aún no he estrenado, pero prometo hacerlo en cuanto pueda. Como decía, mi regalo fue para Amparo Moreno, con quien coincidí en una fiesta organizada por una amiga de mi pareja. Mi regalo era uno de esos aparatos que van a pilas y hacen masajes o, se supone, que hacen masajes, claro. Creo que a ella no le gustó mucho y, la verdad, tampoco me extraña, a mí tampoco me hubiese gustado. De hecho, en cuanto vi su cara, pensé “Dios mío, qué poco futuro te doy, pequeño aparato de masajes”. Sin embargo, unos días después, mientras pensaba en mi pequeño aparato de masajes, me dije, “ostras, ¿dónde estará?” y pensé que, probablemente, estaría perdido en algún lugar de su casa o en manos de otra persona, que es más “vaya mierda de regalo me han hecho esto no me sirva para nada”… No sé, a lo mejor, Amparo Moreno fue a otra fiesta de amigos invisibles, no tendría nada que regalar, se pondría a pensar y al final encontraría el pequeño aparato de masajes en algún lugar perdido de casa, lo empaquetó y, hala, para otra persona. No se lo reprocharía, yo lo haría.
Así que, a lo mejor, esto de los regalos de los amigos invisibles es como un circuito cerrado en el que siempre se hacen los mismos regalos y quién sabe si al cabo de unos años no me volveré a encontrar con el pequeño aparato de masajes.

Tuesday, December 16, 2008

TIEMPO

Tengo una imagen mía de pequeño diciendo a mi madre y a mi hermana que se diesen prisa porque perdíamos el autobús que iba al colegio. No hace falta que diga que no lo perdíamos, no por mi insistencia en darse prisa, si no, simplemente, porque siempre íbamos bien de tiempo, aunque a mí no me lo pareciese.
Creo que nunca he tenido ningún tipo de obsesión, sólo pequeñas manías que, eso sí, no hacen que mi vida quede afectada por ellas. Sin embargo, debo decir que la cuestión del tiempo empieza a preocuparme y, no es que sea una obsesión, pero sí me hace darle vueltas a la cabeza e, incluso, a veces, ponerme de mal humor. No mucho, ¿eh?
Nunca he escrito como método terapéutico, simplemente, por placer, pero esta vez sí lo estoy haciendo para ver si, escribiendo, consigo no comerme tanto la cabeza. Es una tontería, pero siempre estoy mirando el reloj para ver cuánto tiempo me queda antes de irme a la cama y poder hacer las cosas que me gustan. Ay, la cama, el dormir; un placer, pero a la vez, una especie de maldición que hace que un tercio de tu vida no dependa de ti, que estés, pero a la vez no estés. Dicen que existen los sueños lúcidos, esos que uno puede dirigir en mayor o menor medida, pero ya nos entendemos, no es lo mismo que la consciencia, el estar despierto y saber lo que haces en cada momento.
Como decía, (casi) me obsesiona el tiempo porque quiero dedicarlo a cosas que me gustan que, al final, hago de puntillas, como leer un librillo de no más de 100 páginas y que nunca acaba, una pequeña conexión a internet, ver un poco de televisión (de la buena, claro, o sea, basura), leer el periódico tranquilamente…
Hasta hace unas semanas llevaba el reloj avanzado 20 minutos y la verdad, no sé cuándo decidí hacerlo. Sé que una día lo adelanté unos minutos, creo que unos 10, y fue subiendo hasta los 20 minutos conforme mi (no) obsesión fue en aumento. Espero que haberlo puesta en hora y este escrito sirvan de algo, aunque sea, que sirvan de placebo.

Thursday, December 11, 2008

UNA SIESTECILLA

Hoy he ido a una sesión de relajación y he estado a punto de quedarme dormido, con lo cual, me imagino que ha funcionado. De hecho, la cabeza ha estado a punto de caérseme tres veces. Esperaba que me dijesen cosas como que me concentrase en un punto o algo así, pero me han sorprendido con “centraos en los pies, poned la energía en los pies”. Supongo que para los expertos en la materia no es difícil y simplemente se abstraen de todo lo exterior y se centran en los pies, sin embargo para mí, sí lo es. Cuando me dicen que focalice un punto en la mente o ponga toda la energía en alguna parte del cuerpo, empiezo a preguntarme cómo se hace eso y si hay alguien más como yo, que no tiene ni idea de lo que le están diciendo. El caso es que me he concentrado como he podido en los pies y, poco a poco, hemos ido subiendo hasta llegar a la cabeza. No sé cómo ha sido, pero ha llegado un momento en que oía una especie de susurro mientras respiraba lenta y profundamente intentando concentrarme en la respiración (ésta es otra…) e intentado que la cabeza no se me cayese.
Realmente, no sé si ha funcionado, pero teniendo en cuenta que ha sido a las 14:30h. y después de comer, pues me lo he tomado como una pequeña siesta, aunque claro, eso es trampa, cualquiera es capaz de dormir después de comer.

Wednesday, December 10, 2008

TRABAJO Y TELEVISIÓN

No sé si ya he escrito alguna vez sobre los horarios españoles, si ya lo hecho antes, esto sólo querrá decir dos cosas. La primera sería que todo sigue igual y la segunda, que realmente odio los horarios españoles.
Acabo de leer en el periódico algo sobre la conciliación de la vida laboral con la familiar y dice lo de siempre, que España es el país en el que más se trabaja (bueno, habría que decir que es el país en el que más horas se pasa en el puesto de trabajo y alrededores…) y que tiene la menor productividad de Europa y que se duerme poco. Como ya he dicho, nada nuevo. Dice una experta que habría que salir del trabajo a las 17h. para tener toda la tarde libre y dedicar ese tiempo al ocio o, simplemente, a no hacer nada. Bueno, ¿qué puedo decir?, estoy totalmente de acuerdo con salir a esa hora, salir más tarde me parece tirar el día a la basura. No puede ser que la gente se pase horas y horas en el trabajo. Además, siempre hay gente que no se va a su hora porque como en su empresa, la costumbre es quedarse un rato más, pues allí se quedan pasando el rato.
Otra cosa para, al menos, dormir un poco más, sería adelantar la hora de emisión de los informativos vespertinos y los programas de televisión que se emiten en la franja de máxima audiencia. De estos últimos, no entiendo por qué empiezan tan tarde, cerca de las 22:30h. Directamente, me pone de los nervios. Afortunadamente, como no veo muchos programas de televisión (no porque no me guste la televisión, todo lo contrario, pero eso es otra historia), pues tampoco me importa, pero pienso en toda esa gente que está enganchada a esas series de televisión y, la verdad, me da penilla. Eso, si no hablamos de esos programas que empiezan a partir de las 24h., esos de entrevistas y humor que en Estados Unidos se llaman “late night shows” o algo así. Como siempre, España copió el formato de este tipo de programas y, evidentemente, el horario; así, aparecieron el del Misisipi, el de Marte y muchos más. La verdad es que estos programas, a pesar de no haberlos visto nunca debido a la hora de emisión, siempre me han parecido interesantes, al menos en algunos casos, aunque, quizás, precisamente, debido a que no puedo verlos, me han parecido interesantes…
Sin embargo, mis ruegos han tenido respuesta. Parece que Jay Leno, uno de los presentadores más famosos de Estados Unidos va a cambiar la hora de inicio de su programa, pasando de las 24h. a las 22h. Evidentemente, no hace falta que diga que si tiene éxito (que lo tendrá), dentro de un tiempo (no sé cuánto, ¿un año?, ¿dos?) harán lo mismo en España. Si no, al tiempo.

Wednesday, December 03, 2008

D10S

Si Dios envió a su hijo Jesucristo para salvarnos, hace unas semanas, D10S no podía ser menos y decidió enviarse a sí mismo al banquillo de la selección argentina para intentar meterla en la Copa del Mundo. Me imagino que tanto él como la afición argentina llevaban tiempo esperando este momento y, la verdad, entiendo que el aficionado le quiera en ese puesto, sin embargo, no hay nada peor que alguien considere que está por encima del bien y del mal, como le ocurre a Maradona. Lo bueno de ser entrenador es que si la cosa no va como se espera, la gente suele olvidarse del dios y el entrenador pasa a ser un simple mortal, cosa que puede sucederle al Diego. Todos los entrenadores que han tenido una carrera más o menos larga han triunfado en un sitio y seguidamente, en otro equipo han fracasado o viceversa. De manera que mi consejo es que no crea estar por encima del bien y del mal porque, al final, los resultados decidirán si sigue siendo un dios o un mortal cualquiera.
Cambiando de tema, pero siguiendo en el mundillo de la pelota, debo reconocer que la cagué, sí la cagué, o al menos, eso parece. Hace un par de años escribí una entrada en la que hice un equipo de jugadores que para mí eran un bluff y puse en la delantera a CR7 y a Torres. No veas, ¿no?, qué ojo.

Monday, December 01, 2008

FACEBOOK, FENÓMENO SOCIAL

Sí, es un fenómeno social, probablemente, entre las llamadas redes sociales no ha habido nada igual desde que apareció el Messenger, lo que pasa es que esto es más bestia, diría yo. A pesar de no tener una cuenta, anoche estuve echando un vistazo y vi a gente de la cual no sabía nada desde hace 15 años en unos casos y desde hace 20 en otros. Iba mirando la lista de contactos de todos ellos y siempre aparecía uno nuevo. Debo reconocer que me ha impactado, pero de todos modos, no creo que me abra una cuenta. Me imagino que ahora, aquí, está en fase de expansión, diría que llegando a su máximo nivel de popularidad y dentro de unos meses, se verá como una herramienta más para estar en contacto con la gente, algo parecido a lo que se ha convertido el Messenger. Vamos, que no le va a pasar como a Second Life… Sin embargo, dos cosas me han causado curiosidad. La primera es que, da la impresión de que, cuantos más contactos tengas, parece que eres más guay, lo que se podría comparar con lo que sucede en la realidad, que cuantos más amigos te rodeen, mejor, aunque después, apenas sepas nada de nadie. La otra cosa que me ronda la cabeza es que en un aspecto me recuerda a cuando, en mi colegio, íbamos todos a la discoteca (la “mítica” Apoca…) los viernes. Cuando estabas allí, todo el mundo era muy amigo y se saludaba, sin embargo, al llegar el lunes, nadie se acordaba de la cara de la gente y, tengo la impresión de que, con el Facebook, pasa salgo parecido, la gente intenta agregar a muchos conocidos, aunque después no se digan nada… Afortunadamente, siempre hay alguien con un poco de lucidez que al ser invitado, contesta “para qué me invitas, si después me ves por la calle y no me dices nada…”. Gran frase sólo comparable a la pronunciada por mi nuevo ídolo. Vean, vean.